Desde pequeña quise ser guardiana.
Un sueño hecho realidad
“Siempre me agrado la idea de tener un uniforme, ser guardiana del Inpec ha sido mi sueño desde muy pequeña”.
Angélica Mariño es una joven de 23 años, toda la vida quiso ser guardiana del Inpec y desde hace 5 años pertenece a esta institución del estado, ella nos contó parte de su vida y de su trabajo.
Ángela Peláez: ¿Por qué escogió ser guardiana del Inpec?
Angélica Mariño: Fue un sueño desde muy pequeña, me agrado mucho la idea de tener un uniforme, a demás tengo familia que trabaja en esto.
A P: ¿Cómo fue el proceso para entrar al Inpec?
A M: Riguroso fue un proceso muy duro, primero lo realizo la Comisión Nacional del Servicio Civil, allí nos evaluaron actitudes físicas, intelectuales y sicologicas, fueron varias pruebas y así mismo nos hicieron comprender que íbamos a tener un cargo privilegiado y de gran responsabilidad frente al estado y la sociedad. AP: ¿Hace cuanto tiempo trabaja como Dragoneante del Inpec?
AM: De guardiana llevo aproximadamente cinco años y trabajando en Bogotá estoy trabajando hace año y medio.
AP: ¿Actualmente donde trabaja?
AM: En este momento estoy trabajando en la reclusión de mujeres del Buen Pastor de Bogotá.
AP: ¿Dónde mas ha trabajado?
AM: Labore en la reclusión de mujeres de Popayán.
AP: ¿Como fue el trabajo en esta cárcel?
AM: Fue muy fuerte, porque es muy diferente trabajar fuera de la ciudad de uno dejar tu familia no es nada fácil y enfrentarse a una cultura totalmente diferente resulta complicado.
AP: ¿Usted es casada?
AM: Si soy felizmente casada hace cinco años, tengo mi esposo.
AP: ¿Cuántos hijas tiene?
AM: Tengo dos hijas, una de cuatro años y la menor de dos.
AP: ¿Cuándo se fue para Popayán se llevo a toda su familia?
AM: No, me hubiera encantado pero no tenia la estabilidad allí y que era una ciudad desconocida, estuve sola seis meses mientras me estabilice y a demás el trabajo de mi esposo en ese momento no le daba para viajar pero pudimos estar en contacto mientras tanto, y luego él se fue para Popayán y allí nació mi segunda hija.
AP: ¿Cómo fue esta experiencia de estar sola en una ciudad desconocida y su esposo y su hija en Bogotá?
AM: muy fuerte, fue dura porque estar casada tener mi chiquita tan pequeña y no podía llevarlos por que no sabia a donde llegar y mi esposo tenia un trabajo muy exigente y no podía viajar fue muy duro y eso me ayudo a madurar y crecer como persona; fue difícil pero valió la pena.
AP: ¿Quién cuidaba a su hija mientras usted estuvo lejos?
AM: Conté con la ayuda de mi familia, mi mamá me ayudo mucho, mi suegro, mi esposo sin el apoyo de él hubiera sido un fracaso todo lo que estaba haciendo.
AP: ¿Su familia la apoya en todo lo que concierne a su trabajo?
AM: Lo que mas me gusta de ellos es que siempre me exigen, me motivan y no me creen incapaz.
AP: ¿Su familia esta de acuerdo con su trabajo?
AM: Si, a ellos les gusta, y porque reconocen que este empleo me da una estabilidad y un buen desarrollo profesional.
AP: ¿Qué piensa su esposo de su trabajo?
AM: Le encantaría tenerme todos los días pero el entiende, desde un principio lo acepto siempre a estado colaborándome y sabe que tenemos nuestro tiempo en familia y lo acepta así y en algunos momentos le a tocado de mamá.
AP: ¿Cree que su trabajo puede alterar sus relaciones familiares?
AM: Sin duda si afecta, hay momentos en los que no he podido estar pero en otros momentos ellos valoran el tiempo que estoy con ellos.
AP: ¿Quién cuida a sus hijas mientras usted trabaja?
AM: Mis niñas estudian, una sale a las cuatro y la otra a las cinco de la tarde, después del colegio el papá se hace cargo de ellas y los fines de semana me ayuda la abuela y el papá.
AP: ¿Le gustaría que sus hijas siguieran su ejemplo?
AM: Yo respeto lo que ellas piensen, a mí como madre no me gustaría, pero si ellas lo ven como algo que se convirtiera en su sueño, en su meta lo respetaría y lo apoyaría.
AP: ¿Cuanto tiempo trabaja en la semana?
AM: Generalmente yo trabajo veinticuatro por veinticuatro, descanso veinticuatro horas y trabajo veinticuatro horas así durante todo el año.
AP: ¿Por qué hay mujeres que trabajan toda la semana y usted 24 por 24?
AM: porque ellas trabajan en las oficinas como en cualquier empresa, y otras estamos ubicadas en los pabellones y los horarios son distintos.
AP: ¿Cómo es su trabajo?
AM: Mi trabajo es exigente, ya que este depende de mí, de seguridad la de mis compañeras y a demás la de las reclusas.
AP: ¿Cómo es su relación con las reclusas?
AM: Buena, no e tratado de buscar amigas, se debe manejar una tolerancia y ser respetuosas con ellas.
AP: ¿Cómo es el trato de sus compañeras hacia las reclusas?
AM: No falta la que quiere sobre pasarse pero estamos hay para ayudarlas y brindarles una estabilidad emocional y ayudarles a salir adelante.
AP: ¿Cree usted que su trabajo es más fácil que el de un hombre?
AM: No, diría que las responsabilidades son iguales, yo trabajo con mujeres tengo que tratarlas como mujeres.
AP: ¿Cuál a sido la experiencia mas difícil que le ha tocado afrontar en estos cuatro años de trabajo?
AM: Llevaba como un mes y me toco un patio unas internas me golpearon y me incapacitaron por un tiempo, porque no las trate con dureza y desde hay aprendí que hay que tratarlas duro pero con respeto, no dejarse de ellas pero no llevarlas hasta los golpes, hay que tratarlas muy fuerte.
AP: ¿Durante su tiempo de trabajo nunca ha tenido un intento de fuga por parte de las internas?
AM: Si, varias veces pero nosotras hemos estado muy atentas, muy pilas en nuestro trabajo y sabemos que si esto pasa nos puede costar hasta el puesto.
AP: ¿Cómo es el asenso en el Inpec?
AM: El asenso es por merito, por tiempo. La institución primero hace una selección mira las capacidades, el desempeño, y este personal es llamado a un curso de asenso.
AP: ¿Cuáles son los grados de la institución?
AM: Son ocho grados, primero es Dragoneante, luego Distinguido, Inspector, Inspector Jefe, Teniente, Capitán, Mayor, y comandante superior.
ÁNGELA ROCÍO PELÁEZ CÁRDENAS